domingo, 6 de octubre de 2019
martes, 4 de junio de 2019
NOTICIAS SOBRE EL AMBIENTE
Instalarán sensores que medirán la contaminación ambiental en Jesús María
Los docentes y estudiantes del Centro de Tecnologías de Información y Comunicaciones (CTIC), de la Universidad Nacional de Ingeniería (UNI), instalarán en Jesús María 12 módulos con sensores que medirán el nivel de contaminación ambiental en el distrito en tiempo real.
Los sensores pueden medir en un radio de uno a cuatro kilómetros y cuentan con una cámara integrada que calcula el proceso de fotosíntesis de las plantas de acuerdo con su color y con solo apuntar hacía ellas. También tienen capacidad para medir la humedad, temperatura, radiación UVA y UV, velocidad y dirección del viento, presión medio ambiental, ozono, dióxido de nitrógeno, monóxido y dióxido de carbono, entre otros parámetros.
En una primera etapa se instalarán 12 módulos en diferentes puntos de Jesús María, como la propia sede municipal, la avenida Cuba y los principales parques y avenidas del distrito.
El primer módulo será colocado en el Campo de Marte, lo que ayudará a conocer los distintos parámetros medioambientales en el ‘Pulmón de Lima’, a donde a diario asisten miles de personas para realizar distintas actividades recreativas y deportivas, como caminatas, bailes, paseos en bicicleta, patines o descansos al aire libre.
Gracias a este proyecto, Jesús María sería el primer distrito en convertirse en un smart city y en realizar un mapa de contaminación ambiental, tal como lo tienen las grandes ciudades del mundo, lo que permitirá que los ciudadanos conozcan los niveles de contaminación a los que se exponen y que el municipio identifique qué actividades generan más contaminación y en qué zonas, a fin de fiscalizarlas o regularlas, además se podrá plantear iniciativas para reducir esos índices en base a datos exactos.
“Nuestro objetivo es convertir a Jesús María en una ciudad moderna, que vaya hacia la tecnología en beneficio de todos los vecinos. Esperamos ser el primer smart city en Lima, para ello contamos con un plan que transformará a Jesús María en un distrito tecnológico”, agregó.
EL PANEL
EN EL PANEL DE COMUNICACIÓN YO INTERPRETE A UN PROFESIONAL EN LO QUE ES REALIZACIÓN Y PRODUCCIÓN DE AUDIOVISUALES.
REALIZACIÓN Y PRODUCCIÓN DE AUDIOVISUALES, PERTENECIENTE A LA FAMILIA PROFESIONAL DE IMAGEN Y SONIDO, ESTE CHICO CAPACITA AL ALUMNO PARA ORGANIZAR Y SUPERVISAR LA PREPARACIÓN, REALIZACIÓN Y MONTAJE DE PROYECTOS AUDIOVISUALES FILMADOS, GRABADOS O EN DIRECTO, ASÍ COMO REGIR LOS PROCESOS TÉCNICOS Y ARTÍSTICOS DE REPRESENTACIONES DE ESPECTÁCULOS EN VIVO Y EVENTOS, COORDINANDO LOS MEDIOS TÉCNICOS Y HUMANOS CONTROLANDO EL CONTENIDO, LA FORMA, EL PROYECTO ARTÍSTICO Y LA CALIDAD ESTABLECIDA.
ESTA CARRERA ESTABA RELACIONADA CON LA CONTAMINACIÓN SEGÚN MI PARECER PORQUE LAS PELÍCULAS SOBRE EL AMBIENTE TAMBIÉN CONCIENTIZAN A LAS PERSONAS, MÁS QUE TODO NIÑOS, A PODER REFLEXIONAR Y PODER TOMAR MEJORES DECISIONES.
EL ACHIQUEE
EL ACHIQUEÉ
Narradora: En un pueblo pequeño vivían dos
huérfanos que vagaban acosados por el hambre. Cierto día,
vieron pasar a un gorrión por el cielo, el cuál llevaba en el pico la flor de
la papa (producto muy codiciado y escaso en la zona), entonces la hermana mayor
dijo.
Niña: Mira hermanito, ves a ese pájaro,
sigámoslo para ver en dónde se encuentran esos ricos tubérculos pues por lo que
veo lleva en su pico una flor de papa.
Niño: Si hermana tienes razón, además ya
tengo mucha hambre.
Niña: Entonces apurémonos y vamos.
Narradora: En el pueblo vivía también el
Achiqueé, una vieja harapienta y mala, la cual al saber que los niños iban en
busca de las papas, decidió matarlos y quedarse con el alimento.
Achiqueé: ¿Qué tal niñitos? ¿Hacia dónde se
dirigen ustedes dos solitos? ¿Encima vas con un pequeño? Déjenme ayudarlos, vayamos
a mi casa para comer un poco.
Niño: Sí, yo tengo mucha hambre.
Niña: Muchas gracias señora, pero no tenemos
cómo pagarle, como puede ver usted, mi hermanito y yo somos dos huérfanos sin
casa y padres.
Achiqueé: No te preocupes hija, eso después lo
veremos. Vamos
Narradora: El Achiqueé guió a los pequeños a su
choza y al llegar le dijo a la niña.
Achiqueé: Nena, por favor ¿podrías cortar un
poco de leña para ir encendiendo el fuego?
Niña: ¿Fuego? ¿Para qué?
Achiqueé: Para poder calentar la cena hijita.
Niña: Oh bueno, está bien.
Narradora: El Achiqueé aprovechó que la niña
estaba distraída para coger al pequeño y matarlo.
Niño: ¿A dónde vamos señora?
Achiqueé: Iremos a preparar la comida,
JEJEJEJE
Niño: Y, ¿por qué me está echando en la
mesa?
Achiqueé: Para que descanses un poco.
Narradora: La vieja estaba a punto de
acuchillar al pequeño pero en ese momento la niña reacciona.
Niña: Eyy¡¡ Suelta a mi hermano¡¡
Narradora: La niña le arrojó una piedra a la
vieja, y esta se cayó.
Entonces
agarró a su hermanito, lo puso en su espada con la lliclla que tenía puesta y
huyó de la choza. También el
Achiqueé los siguió corriendo y cuando ya estaba casi cerca, los niños
encontraron a un gallinazo, y la pequeña le dijo.
Niña: Tío gallinazo, escóndenos bajo tus
alas.
Gallinazo: Está bien. !Rápido métanse aquí¡
Narradora: El gallinazo escondió a los
huérfanos entre sus alas y cuando llegó la vieja le preguntó.
Achiqueé: Tío gallinazo, ¿has visto a dos
mocosos corriendo por aquí?
Gallinazo: No, no los he visto.
Achiqueé: No mientas, estoy segura que los ví
pasar por aquí. Ya dime dónde están
mugrosa ave¡¡
Gallinazo: ¿Qué me dijiste?
Narradora: El gallinazo al escuchar esto se
molestó y le dio un aletazo a la vieja, lanzándola al suelo. En ese mismo
instante la niña reacciona, coge a su hermano y se alista para huir, pero antes
de eso le dice al ave.
Niña: Gracias tío gallinazo. Por habernos
ayudado tendrás buena vista y nunca te faltará comida.
Gallinazo: Muchas gracias. Ahora aprovechen en
huir, ¡Rápido, corran!
Narradora: Los niños siguieron corriendo. Pero
nuevamente el Achiqueé se había levantado y corrió con todas sus fuerzas para
alcanzar a los huérfanos.
Achiqueé: ¡No se escaparán mocosos!
Narradora: Entonces los niños se toparon con el
puma y la niña le dijo.
Niña: Tío puma, una vieja nos persigue
para matarnos, por favor, ¿podrías defendernos?
Puma: No se preocupen, colóquense dentro
de esa cueva.
Narradora: Cuando el Achiqueé llegó, le dijo al
puma.
Achiqueé: Suelta a esos dos huérfanos ¡son
míos¡¡
Narradora: El Achiqueé quiso acercarse, pero el
puma le tiró un zarpazo arrojándola otra vez al suelo. Y la niña
aprovecha esto para huir con su hermano, pero antes dice:
Niña: Gracias tío puma. Por esto, serás el
más valiente de los animales.
Puma: Gracias pequeña. Ahora corre y
sálvate.
Narradora: La niña y su hermano siguieron
corriendo y corriendo, perseguidos por el Achiqueé la cual siempre repetía:
Achiqueé: No se me escaparán mocosos.
Narradora: Por último, los huérfanos se
encontraron al añaz (zorrillo) y la niña le dijo:
Niña: Tío Añaz, ayúdanos y protégenos del
Achiqueé que nos viene persiguiendo desde hace buen rato.
Añaz: No me molesten, estoy descansando
tranquilamente y vienen a malograrme el día. Váyanse.
Niña: Por favor, ayúdanos a mi hermanito y
a mí.
Añaz: ¿Que no entienden? Quiero dormir, no
me molesten.
Niña: Que malo eres, por esto tendrás un
olor repugnante y así serás cazado fácilmente por tus cazadores.
Narradora: Luego de haber dicho esto, la niña y
su hermanito siguieron corriendo hasta que ya no pudieron más.
Achiqueé: Quédense ahí mocosos, al fin se
detienen.
Narradora: Entonces, los huérfanos, al no
encontrar otra salida, decidieron arrodillarse y orarle a San Jerónimo.
Huérfanos: ¡Por favor, San Jerónimo, haz que
subamos a la chacra de papas, para poder alimentarnos y salvarnos de esa bruja!
Narradora: De repente se abrieron los cielos y
apareció San Jerónimo, quien tirando una cuerda, los hizo subir. El Achiqueé
al ver esto también exclamó.
Achiqueé: Taita Jerónimo, haz que suba yo
también.
Narradora: San Jerónimo le arrojó una cuerda
pero con un ratoncillo, el cual la estaba masticando. El Achiqueé al darse
cuenta dijo:
Achiqueé: ¡Oye trompudo inútil! ¿Por qué comes
mi soga?
Ratoncillo: No me molestes vieja, yo estoy
comiendo mi semita quemada.
Narradora: El Achiqueé al ver que está a punto
de morir, exclama unas últimas palabras.
Achiqueé: ¡Que mi cuerpo se desparrame, que
mis huesos se incrusten en la tierra y mi sangre seque las plantas y hierbas!
jueves, 2 de mayo de 2019
EL CHICO NUEVO
Cierto día, en una hermosa mañana en la
que empezaban las clases, algunos niños asistían a la escuela emocionados;
mientras que otros querían faltar.
Faltando cinco minutos para entrar a los
salones, llegó a la escuela, Teodoro Johnson; un chico nuevo que venía de
Lambayeque, recién hace una semana.
Al entrar al salón, todos lo vieron de
una forma rara y extraña, como si estuvieran viendo a un extraterrestre. Ya que
físicamente era diferente a los demás.
Llevaba siempre puesta la mochila, era de
contextura delgada pero de cuerpo marcado y formado, de pelo crespo y negro, de
ojos marrones, era pecoso y de más está decir que se sentía nervioso.
En el recreo, Teodoro se sentó en un
banco del patio, obviamente solo. Poco a poco se le empezaban a acercar los
estudiantes, ya que su cabello brillaba intensamente y se veía hermoso.
Cuando acabó el recreo todos regresaron
al aula, y ya dentro, el profesor mandó a los alumnos agruparse de cuatro
integrantes para realizar un trabajo de equipo. A Teodoro se le acercaron
algunos compañeros: Tres para ser más exactos. Él los miró alegremente e hizo
grupo con los chicos.
Teodoro era gracioso sólo cuando entraba
en confianza. Lo que sí no tenía, era facilidad para expresar sus ideas.
Simplemente obedecía.
Él sabía que se estaban aprovechando,
pero no decía nada por temor a las críticas.
Aunque frecuentemente se sentía triste
porque recordaba a la chica que le gustaba, que lo atraía, que lo sacaba de su
realidad, y que lo odiaba. Ella no quería ni acercársele a Teodoro. Él no
aguantaba tanto dolor, sufría y se deprimía día a día. También se enfrentaba a la soledad. Aunque trataran de incluirlo en los grupos, él se alejaba porque estaba acostumbrado a un ambiente sin personas,lo cuál estaba mal.
Pero nuestro querido amigo siempre
buscaba una forma de distraerse, y que mejor manera que haciendo ejercicios. A
él lo reconocían por levantar pesas de muchos kilos.
Poco a poco, Teodoro fue aumentando sus
calificaciones, su destreza en el deporte y su lado alegre y sociable.
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